Había nacido en Toledo en 1867, aunque sus padres eran asturianos. El padre había sido diputado en el Congreso y sería más tarde alcalde de Toledo.
Desde muy niña Isabel comenzó a leer todo tipo de libros; y además hablaba francés. Se casó con un juez, Rafael de Corcuera y Argüelles, de ideas abiertas, para lo que sería la sociedad bienpensante de la época.
Con ayuda económica de la familia, fundaron una sociedad (puesta a nombre de ella, cosa poco habitual) que fue la primera concesionaria del servicio telefónico en la ciudad de Toledo, que comenzó a desarrollarse en diciembre de 1890.
Isabel González-Alegre Fanjul
Lo que hoy nos puede parecer un negocio seguro, puede que en aquella época no lo fuera tanto, pues era un servicio hasta entonces desconocido; en todo caso requería de un sentido empresarial y de riesgo notable.
Isabel González-Alegre Fanjul murió en Aranjuez en enero de 1937, de causa natural, en plena guerra civil.