Hace unos días trajimos a Fábrica de la Memoria la figura de Catalina de Aragón.
Hoy, gracias a Sandra Ferrer, nos enteramos de que se conmemora el nacimiento de su hija, María Tudor, llamada “María la sanguinaria” por los partidarios de su hermana Isabel.
La vida de María no fue fácil ni cuando reinó.
Enamorada de Felipe II, tras haber visto el retrato que le hizo a este Tiziano, no cejó hasta contraer matrimonio con él ;acontecimiento que tuvo lugar el 25 de julio de 1554 en la catedral de Winchester. Ella tenía 38 años y Felipe 27.
El matrimonio para Felipe era un asunto estrictamente político pues declaró que admiraba su dignidad, pero que no sentía ningún deseo carnal por ella.
El magnífico , pero tremendo retrato que Antonio Moro hizo a María plasma la amargura que tiñó la vida de casada de María, empecinada a toda costa en darle un heredero al monarca español hasta el punto de sufrir varios embarazos histéricos.
Retrato de María Tudor. Autor: Antonio Moro.