La bicicleta, símbolo de modernidad rápidamente popular entre el sexo femenino, no se libró de ataques misóginos que aparecieron en prensa alertando de los peligros que acechaban a las féminas que osasen montar en bici: cara enrojecida, ojeras, rostro demacrado eran algunos de los inconvenientes alos que se enfrentaban las transgresoras y que las alejaban de la imagen de ángel del hogar.

Cara de bicicleta